jueves, 30 de octubre de 2008

El salvamento

El comando en la calle, no más de 10 personas lo formaban, preparados y dispuestos para la misión. Todos ellos concienciados al 100%, tenían muy claro que aquello debía llegar a buen puerto. Su entrenamiento no era bueno, quizá no tuvieran ningún tipo de entrenamiento, pero la ilusión que en sus ojos vivía hacía presagiar un final feliz, ante ellos un edificio inacabado, una operación de salvamento, todo comenzaba...

No llegue a verlo, pero estaba confiado en que triunfarían, que lo conseguirían y que volverían a casa con el deber cumplido y el corazón lleno de emoción. Con los sentimientos a flor de piel me fui, creyendo posible que su hazaña concluyera felizmente.

He de decir que el gatico estaba predispuesto a bajar de la cornisa, del edificio a medio hacer, en la que se había encaramado, aunque fuera apoyándose en una nevera, de las de playa, que sustentaba un fornido muchacho, encaramado a su vez, en un coche que habían subido a la acera expresamente para esta maniobra, acompañado y aconsejado por una caterva de personas, no mas de 10, las cuales apoyaban y animaban. Como ya he dicho, no lo vi, pero imagino que todo acabo bien, que el gato esta feliz y los demás orgullosos de haber participado en aquello. Imagino los aplausos.

Aplausos, pero mi creatividad va un poco mas allá e imagina: 'Hoy en estrenos de cartelera: "Operación Gatico, ¡¡baja de la cornisa, jodio!!"...'

Besucos para todos.

miércoles, 1 de octubre de 2008

Lo que me faltaba por oir (leer)

Por ciscunstancias completamente ajenas a mi interes personal, tuve que visualizar un partido de fútbol el fin de semana pasado, mas concretamente la disputa entre el Espanyol contra el Barcelona. He de decir, por si no ha quedado claro anteriormente, que no deseaba ver ese partido, ni ninguno, ni por todo el oro del mundo, pero las circunstancias eran las propicias para que tuviera que tragarmelo.

Ocurrio algo que creo de escarnio publico, unos exaltados, por llamarlos de alguna forma, seguidores del Barcelona -los llamados boixos nois-, lanzaron bengalas a los aficionados del Espanyol, formaron un gran revuelo y obligaron a las fuerzas del orden público a actuar, con mas o menos dureza.

Lo sorprendente viene ahora, he leido unas declaraciones de algunos de estos radicales del Barcelona, los cuales han culpado, de su propia actuación, a las pocas medidas de seguridad tomadas por el Espanyol y a los ligeros cacheos de los cuerpos de seguridad. Esto no se que nombre tiene, pero me suena a cachondeo, "He matado a un hombre, pero la culpa es suya, estaba en su casa, sin chaleco antibalas y nadie me ha quitado el arma...".

Menos mal que sigue siendo un juego, un juego muy caro, sobre todo por las fichas de algunos de los "jugadores" -Con el ajedrez no se gana tanto dinero y me parece que se requiere un poco mas que en el fútbol, si, bueno, no?-. Y sin hablar de los personajes que forman parte de los equipos, que eso es para una entrada aparte.

Dame pan y llamame tonto, sin problemas, porque me voy a preocupar de la situación económica, porque voy a tener conciencia de la situación social actual de mi país, de mi región, de mi ciudad, todo va bien mientras mi equipo de fútbol vaya bien. Y si no va bien me quejo por quejarme, porque no tengo ni idea de lo que pasa, yo sigo al que me cae bien y ya está. No hay mas ciego que el que no quiere ver.

Que suerte tenemos en vivir en un país civilizado, con un alto nivel cultural, una gran conciencia social y un gran respeto hacia el prójimo. Perdón, ¿estamos en Alemania, Francia, Holanda, Suiza, Portugal...? NO.

Muchos besos indignados.